En un programa académico cargado de emoción y orgullo, 15 jefes de habitaciones de varios hoteles han culminado con éxito un intenso curso de 24 horas de duración: Entrenado a Entrenadores de Housekeeping.
Este logro marca un hito significativo en sus carreras, mejorando sus habilidades de comunicación y liderazgo, esenciales para ofrecer un servicio de excelencia en la industria hotelera.
El curso abarcó una variedad de temas fundamentales para su desarrollo profesional, incluyendo:
- Estándares de servicio: Fundamentales para garantizar la satisfacción de los huéspedes y mantener la calidad que caracteriza a sus hoteles.
- Cómo ser un entrenador eficaz: Capacitando a los participantes en técnicas para transmitir conocimientos de manera efectiva a sus equipos.
- Storytelling – El arte de contar historias: Enfocándose en la habilidad de comunicar mensajes de manera atractiva y memorable.
- Profundización en la matriz de entrenamiento: Proporcionando herramientas para desarrollar y evaluar programas de capacitación.
- ABC de Housekeeping: Repasando los principios básicos y avanzados de la gestión de habitaciones.
- Manejo de estudiantes difíciles: Estrategias para enfrentar y superar desafíos en el proceso de enseñanza.
- Técnicas lúdicas para facilitar el aprendizaje: Implementando métodos innovadores para hacer el aprendizaje más dinámico y efectivo.
- Inmersión en el menú de operaciones de GHLINK: Familiarización con las herramientas tecnológicas de gestión hotelera.
- Repaso de procesos administrativos: Asegurando el dominio de procedimientos críticos para la operación diaria.
- Exposiciones finales ante un tanque de tiburones (Shark Tank): Una experiencia que permitió a los estudiantes aplicar todo lo aprendido en un entorno desafiante y realista.
El momento culminante del curso fue, sin duda, las exposiciones finales. Divididos en grupos de cinco, los estudiantes tuvieron que presentar sus proyectos ante un jurado al mejor estilo del popular programa de televisión «Shark Tank». Esta actividad no solo puso a prueba sus conocimientos y habilidades, sino que también les exigió superar el miedo escénico y demostrar su capacidad para comunicarse de manera clara y convincente bajo presión.
A pesar de los nervios iniciales, cada grupo logró superar los obstáculos y ofrecer presentaciones impresionantes, reflejando un profundo entendimiento de los temas abordados y una notable mejora en sus habilidades de oratoria. Este ejercicio no solo evaluó su dominio técnico, sino también su capacidad para trabajar en equipo y su resistencia ante situaciones de alta exigencia.
Al concluir el curso, los participantes no solo adquirieron nuevas competencias, sino que también fortalecieron su confianza y su capacidad para liderar con eficacia.
Enhorabuena a todos los estudiantes. Su éxito es un reflejo del esfuerzo y la pasión que ponen en su trabajo diario, y estamos seguros de que seguirán siendo una inspiración y un ejemplo para sus compañeros y para toda la industria hotelera.