La Historia de los Huevos Benedictinos

Los huevos benedictinos son un desayuno clásico que se dice que fue inventado en la década de 1860 en Nueva York. La historia detrás de este plato es un poco confusa, pero una de las versiones más aceptadas es que fue creado por el chef Lemuel Benedict, quien frecuentaba el restaurante Delmonico’s en la ciudad de Nueva York.

Según la historia, Benedict habría pedido huevos pochados, beicon y pan inglés tostado, todo cubierto con salsa holandesa, como remedio para su resaca en un domingo por la mañana. El chef del restaurante, inspirado por la petición poco convencional, decidió incluirlo en el menú y lo llamó «huevos Benedict» en honor a su creador.

La receta de los huevos benedictinos es relativamente sencilla, pero requiere un poco de habilidad para pochar los huevos y preparar la salsa holandesa.

Ingredientes:

  • 4 huevos
  • 2 muffins ingleses, cortados por la mitad y tostados
  • 4 lonchas de beicon o jamón cocido
  • Salsa holandesa (ver receta abajo)
  • Perejil fresco picado (opcional, para decorar)
  • Sal y pimienta al gusto

Instrucciones:

  1. Prepara la salsa holandesa siguiendo la receta a continuación.
  2. En una sartén grande, cocina el beicon o jamón hasta que esté dorado y crujiente. Retira el exceso de grasa con papel de cocina y reserva caliente.
  3. Llena una cacerola grande con agua y caliéntala hasta que esté a punto de hervir. Reduce el fuego para que el agua esté a fuego lento.
  4. Rompe los huevos uno a uno en un bol pequeño o una taza. Con cuidado, deslízalos suavemente en el agua caliente. Cocina los huevos durante unos 3-4 minutos, o hasta que las claras estén firmes pero las yemas aún estén líquidas.
  5. Mientras se cuecen los huevos, tosta los muffins ingleses y colócalos en platos individuales.
  6. Cuando los huevos estén listos, retíralos del agua con una espumadera y escúrrelos bien.
  7. Coloca una loncha de beicon o jamón sobre cada mitad de muffin tostado, seguido de un huevo pochado.
  8. Cubre cada huevo con una generosa cucharada de salsa holandesa caliente y espolvorea con perejil picado si lo deseas. Sirve inmediatamente.

Receta de salsa holandesa:

  • 3 yemas de huevo
  • 1 cucharada de agua
  • 1 cucharada de zumo de limón
  • 1/2 taza (115 g) de mantequilla derretida
  • Sal y pimienta al gusto
  1. En una cacerola pequeña, bate las yemas de huevo con el agua y el zumo de limón.
  2. Coloca la cacerola sobre fuego medio-bajo y continúa batiendo constantemente hasta que la mezcla esté ligeramente espumosa y haya espesado un poco, aproximadamente 1-2 minutos.
  3. Retira la cacerola del fuego y comienza a añadir la mantequilla derretida en un hilo fino, batiendo constantemente, hasta que la salsa tenga una consistencia suave y cremosa.
  4. Condimenta la salsa con sal y pimienta al gusto y sírvela caliente sobre los huevos benedictinos.

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